¿Y CÓMO NOS VA?

Si estuviéramos viendo un partido de fútbol podría ser que nuestro equipo esté jugando bien o mal, pero lo importante es cómo va el score, es decir: ¿estamos ganando?, ¿perdiendo? o ¿empatando?

Sabemos que la situación interna en nuestro querido Perú es inestable y caótica, la pobreza es alta y hay inseguridad; pero revisemos algunas cifras del año 2022 pues no todo es taaann malo.

Cifras positivas:

• Exportaciones $65 800 millones (récord histórico).
• Exportaciones-importaciones: $9 000 millones.
• Sunat cobró S/ 157 800 millones (récord).
• Reservas $74 000 millones (38% del PBI, el % más alto de Latinoamérica).
• Empleo en aumento, ya somos más de 17 millones de personas trabajando (la mayoría informales).

Cifras no tan positivas

• Inflación 8.5% (la más alta en 25 años).
• PBI de 2.7% (bajo crecimiento).
• Desempleo en descenso pero aún es 7% (es mayor en el campo).
• Nivel de pobreza en 25% (es mucho mayor en el campo).

Aunque no lo creas en el 2022 hemos logrado la mayor exportación de nuestra historia así como la mayor recaudación de impuestos.

Es cierto que los precios subieron como consecuencia de la guerra entre Ucrania y Rusia, y los bloqueos en las carreteras, por ello la inflación es de 8.5%, la más alta en 25 años, sin embargo es una de las más bajas en Latinoamérica pues en Colombia fue 13% ¡y en Argentina fue del 100%!

Las reservas en el BCRP se mantienen en $74 000 millones que equivale al 38% del PBI, lo que contribuye a un tipo de cambio estable.

También es cierto que la pobreza nacional sigue en un alto 25% y es aún más alto en las zonas rurales de Ayacucho, Huancavelica y la Sierra en general (y allí surgen el vandalismo y los reclamos).

¿Qué pasará más adelante? En el corto plazo los ingresos por turismo bajarán castigando sobre todo a los pequeños comerciantes y empresas turísticas  de la Sierra beneficiando al narcotráfico y minería ilegal, lo que está siendo aprovechado por azuzadores con deseos de poder y riqueza pues el Perú produce mucho dinero. Deberíamos tener elecciones pero es difícil esperar gobernantes sensatos que mejoren los servicios del Estado como la salud, educación, seguridad e infraestructura.

Podemos decir que en general nuestra economía seguirá creciendo con desigualdad pues nuestros gobernantes no muestran capacidad ni estrategia para reinvertir el dinero en mejorar servicios y reducir la pobreza sobre todo en nuestra sierra rural.

Obviamente esto puede causar que aumente la violencia pues los azuzadores han mostrado capacidad de organización frente a la tibia respuesta del gobierno y la Policía.

Afortunadamente tenemos libertad de trabajo, inversión y una economía abierta  relativamente estable lo que causa que sigan creciendo los emprendedores y el uso de tecnología en todos los campos.

Según parece seguiremos creciendo a pesar de la inseguridad, deficientes servicios y mala dirección política.

Hoy como ayer dependemos de nosotros mismos.